martes, 5 de febrero de 2008

autobiography

Que raro es creer que tengo la cabeza vacia cuando en realidad mis lagrimales se empeñan en demostrarme lo contrario. Deseando o envidiando posesiones ajenas que nunca voy a poder adquirir, imitando y a la vez, tratando de ser yo misma. Una vida mas para camaras que para mi. Obsoleta. Si, asi es mi vida. Vacia, sin sentido. Y mas cuando me desepciono y sorprendo para mal, observando esperanzada casi con cariño, la posibilidad de alguna vez poder llegar a ser feliz con las pequeñeces que ofrece mi vida. No tiene sentido esto, y de hecho nada lo tiene. Pero me hace sentir peor el parecer falsa al expresarme, el hecho de poder generar repulsio cuando en realidad no la quiero. No entiendo y es una horrible sensacion esta ignoracia hacia el mundo, hacia el crecimiento y a la inevitable evolucion humana. Dejar de ser esto para ser aquello no es algo que me aliente demasiado y nunca lo hizo.
No creia en los cambios hasta que los hice y me di cuenta que mi primer teoria era la que contenia la validez. Detras de las tijeras, los nuevos colores, gustos cambiantes y adolescencia, esta la misma persona y en realidad, no importan los accesorios que cada uno se ponga -llamense musica, maquillaje, ropa o simplemente peinados-, sino mas bien su base. Y la mia no es de las mas blandas, cosa que definitivamente, sigue haciendome una persona infeliz, esa estructura dura y rigida que no aparento tener, pero que en realidad es todo lo que soy. Por mas ridiculo que parezca al ser escrito por alguien que todavia no llego a los 17, aunque este en camino a hacerlo..